Usar la banca digital puede parecer un reto si es la primera vez, y es normal que surjan dudas o temores. Muchos de esos sentimientos vienen de mitos que se repiten, pero que no siempre son ciertos. Conocer la realidad detrás de estas creencias te dará más confianza y seguridad para manejar tu dinero con tranquilidad.
Estos son algunos mitos frecuentes y la realidad que debes conocer:
Usar el banco en línea no es seguro:
Los canales digitales cuentan con diferentes mecanismos de protección: claves personales, códigos de seguridad que cambian cada vez (como el OTP), opciones biométricas (huella o rostro) y sistemas que detectan movimientos extraños. Además, si alguna vez lo necesitas, desde la misma aplicación puedes bloquear o activar tus tarjetas en segundos.
En todo caso, con los conocimientos adecuados, operar en línea siempre será más seguro que cargar con grandes sumas de dinero en efectivo.
Solo los jóvenes pueden manejar la banca digital
La banca digital está pensada para todas las edades. Su funcionamiento busca ser claro e intuitivo, y existen canales de apoyo como el Centro de Contacto, guías y tutoriales para acompañarte en el proceso. Cada vez más personas mayores se animan a usarla y descubren que pueden hacerlo a su propio ritmo, con paciencia y práctica.
Si hago un pago en línea, puedo perder mi dinero
Cada pago o transferencia genera un comprobante digital que puedes guardar o descargar. Eso te da la tranquilidad de tener un registro. Y si llegara a haber un error, el banco puede rastrear la operación. Lejos de ser inseguro, pagar en línea te ayuda a llevar un mejor control y evita extravíos de recibos físicos.
Necesito ser experto en tecnología para usar los canales digitales del banco
No es necesario tener grandes conocimientos. Con manejar algunas acciones sencillas como abrir una aplicación en tu celular o computador, leer un mensaje y escribir tu clave, ya puedes comenzar a usarla. Y si en algún momento tienes dudas, siempre puedes apoyarte en el Centro de Contacto o pedir ayuda a un familiar de confianza.
Con la banca digital tengo que hacerlo todo sin ayuda
Siempre hay canales de contacto disponibles para resolver tus preguntas. Además, puedes avanzar poco a poco: empezar revisando tu saldo, luego intentar con un pago sencillo, y así ir ganando confianza paso a paso.
La realidad es que la banca digital está creada para darte seguridad, comodidad y control, no para complicarte. Romper con estos mitos es el primer paso para aprovechar sus beneficios: menos filas, más independencia y la tranquilidad de tener tu banco siempre a la mano.
La banca digital te brinda confianza y protección, pero también requiere de ti. Con hábitos responsables como no compartir tus claves, revisar los mensajes que recibes y asegurarte de entrar siempre a los canales oficiales podrás mantener tu experiencia segura y tranquila, en todo momento y en cualquier lugar donde estés.