Cada mes de noviembre las ofertas por el Black Friday y el Cyber Monday aparecen por todos lados. Muchos compradores esperan esta temporada con ansias para adquirir un producto en específico.
Otros ven el momento de dejarse conquistar por las ofertas. De modo que el Black Friday y el Cyber Monday pueden ser una gran oportunidad… o una gran trampa.
Cuando las vitrinas de las tiendas y las páginas webs se llenan de descuentos irresistibles con las promociones de tarjetas de crédito, la emoción nos hace pensar que estamos ahorrándonos un buen monto, cuando en realidad podríamos estar gastando más de lo que deberíamos o necesitamos.
Una buena pregunta para guiarte en el momento de comprar algo en oferta es: “¿Lo compraría a precio regular?”.
Si la respuesta es no, es probable que no lo necesites, y que el descuento solo esté maquillando un gasto innecesario.
Aquí te recomendamos qué hacer para asegurar que estás haciendo compras responsables:
- Haz tu lista antes de salir de casa. Incluye lo que realmente necesitas o lo que habías planificado comprar.
- Visita varios establecimientos para identificar la mejor oferta de eso que deseas comprar.
- Cuidado con los “antojos de vitrina”. Ese artículo que nunca habías considerado, aunque esté en 50% de descuento, sigue sin ser una prioridad.
- Pregúntate si lo vas a usar en los próximos 3 meses. Si la respuesta es no, probablemente puedes esperar o no lo necesitas.
- Calcula el “costo por uso”. Algo puede estar barato, pero si lo usas una vez al año, realmente no estás aprovechando tu dinero.
- Revisa si el producto reemplaza algo que ya tienes. Si tu celular, televisor o tenis funcionan bien, quizás no es el momento de cambiarlos.
- No compres solo por la emoción del descuento. Si la única razón para llevarlo es que “estaba barato”, mejor no te lo lleves.
Recuerda la regla de oro: lo barato, si no lo necesitas, te sale caro. El verdadero ahorro no está en el porcentaje del descuento, sino en no comprar algo que no quieres ni necesitas solamente porque está en oferta.
